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Las personas sin hogar están empapadas, pero L.A. no abrirá refugios hasta diciembre

A man looks into his tent on L.A.'s skid row
John Gunn mira su tienda de campaña en Skid Row después de que la lluvia y el granizo empaparan sus pertenencias.
(Al Seib / Los Angeles Times)

Mientras las tormentas, el granizo y las frías temperaturas azotan Los Ángeles, decenas de miles de personas que se acuestan en las calles luchan por mantenerse secas y calientes.

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Walter Smith fue despertado el miércoles por la mañana con la lluvia. Llegaba desde arriba, a través de los agujeros hechos jirones en la tienda de campaña que había conseguido en un parque del centro, y se filtró también por la parte inferior, empapando su camisa, pantalones y calcetines.

“Si no te despiertas antes de que arrecie te despertarás empapado”, dijo Smith, un hombre de 56 años con tos seca que dijo que ha estado sin hogar durante tres años. Se preocupó sobre dónde encontraría más ropa que se adaptara a su fornido cuerpo: zapatos talla 13 y pantalones talla 40. “No puedo encontrar una manera de impermeabilizar una tienda de campaña”.

A medida que las tormentas, el granizo y las temperaturas heladas han descendido en Los Ángeles, decenas de miles de personas que se acuestan en las calles luchan por mantenerse secas y calientes.

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El clima húmedo y frío llega a menos de dos semanas antes de que la Autoridad de Servicios para Personas sin Hogar de Los Ángeles inicie su programa de refugio de invierno, que tiene como objetivo brindar a la gente más opciones nocturnas a medida que bajan las temperaturas.

El portavoz de LAHSA, Ahmad Chapman, dijo que “debido a limitaciones de fondos, ese programa no se abre hasta el 1 de diciembre”.

En Union Rescue Mission en Skid Row, el CEO Andy Bales dijo que el edificio estaba lleno y lamentó que su organización sin fines de lucro aún estaba esperando la aprobación de la ciudad para abrir una nueva estructura en su estacionamiento para albergar a las mujeres sin hogar.

Margaret Wiley outside her tent on skid row
Margaret Wiley afuera de su tienda en Skid Row el miércoles.
(Al Seib / Los Angeles Times)

“No hay forma de que alguien pueda soportar esto por mucho tiempo”, dijo Bales sobre el clima frío y húmedo.

En la calle cercana de Crocker Street, John Gunn y Margaret Wiley calculaban el miércoles el desorden húmedo en sus tiendas de campaña. Gunn se quejó de que el agua le había entrado en su tienda de campaña durante la noche y pensó que necesitaban “carpas sobre palos”. Wiley había regresado a su tienda después de un estallido de granizo y descubrió que su ropa nueva estaba empapada.

“Todo lo que me mantendría caliente se empapó”, dijo Wiley, temblando.

En San Julian Park, Wendell Blassingame había instalado un gran paraguas y una mesa plegable protegida por una lona, manteniendo su puesto habitual como el “Skid Row fixer”, ayudando a las personas sin hogar en lo que sea posible. El martes, dijo que entregó casi mil pares de calcetines. Armado con un pequeño cuaderno el miércoles, esperaba decenas de chaquetas de alguien que acababa de llamarle a su teléfono móvil.

Desire Rimbert moves her belongings under a tent
Desire Rimbert, de 27 años y oriunda de Colorado, trabaja para proteger sus pertenencias dentro de su tienda cerca de Skid Row, mientras cae lluvia y granizo en el centro de Los Ángeles el miércoles.
(Al Seib / Los Angeles Times)

“¡Sólo tenía cuatro abrigos de plástico con capuchas y para las 8 a.m., BAM! Los repartí de inmediato”, dijo Blassingame.

Activistas locales dicen que se han visto inundados con solicitudes de lonas y mantas para personas sin hogar. Jane Nguyen, una de las cofundadoras de Ktown for All, dijo que estaba “conmocionada” de que “un grupo de voluntarios no remunerados trataban de satisfacer las necesidades básicas de supervivencia de las personas más vulnerables”, en lugar de las agencias gubernamentales.

“Estamos luchando, tratando de satisfacer la necesidad”, dijo Nguyen.

John Gunn leaps over water at his tent in skid row on Wednesday
John Gunn salta sobre el agua fuera de su tienda de campaña el miércoles.
(Al Seib / Los Angeles Times)

Advirtió que la lluvia probablemente llevaría a más gente a sufrir hipotermia y otras dolencias. El año pasado, cinco personas sin hogar murieron en el condado de Los Ángeles por causas que incluyeron o fueron complicadas por hipotermia, según la oficina del forense. Eso es más que en la ciudad de Nueva York o San Francisco.

Joanna Swan, quien es voluntaria en el grupo Street Watch L.A., dijo que había estado recogiendo plástico sobrante con el que envuelven grandes obras de arte en su trabajo diario y llevarlo a las personas que viven en las calles de Chinatown para ayudarlos a proteger sus pertenencias.

La gran mayoría de los votantes del condado de Los Ángeles consideran que las fuerzas del orden deberían tener un papel más importante en la resolución de la crisis de las personas sin hogar, según una nueva encuesta realizada por Los Angeles Times y el Instituto del Consejo de Negocios de Los Ángeles. (Los Angeles Business Council Institute)

Nov. 19, 2019

En condiciones climáticas extremas, “los problemas menores de las tiendas se convierten en problemas mucho mayores”, dijo Swan.

La lluvia puede ser especialmente peligrosa para la gente que acampa cerca de las vías fluviales, como el río Los Ángeles. Chapman, portavoz de LAHSA, dijo que los equipos de extensión habían salido en los últimos días a áreas que son susceptibles a las inundaciones para advertir sobre la próxima lluvia y “alentar a esas personas a buscar un lugar más seguro”.

Algunas reglas de la ciudad son más permisivas durante la lluvia, según funcionarios de Los Ángeles. Alex Comisar, portavoz del alcalde Eric Garcetti, dijo que en las áreas donde llueve, se permite que las carpas permanezcan durante el día y los equipos de la ciudad sólo realizan “limpiezas parciales” en lugar de limpiezas integrales que requieren que las personas bajen sus carpas y se muden .

Sin embargo, los miembros de la coalición Services Not Sweeps se quejaron de que las limpiezas habían continuado en los días previos a la lluvia y que las personas habían perdido posesiones cruciales como resultado.

Mientras la lluvia se detenía por un momento en Skid Row, Taviah Hopkins se encontraba bajo el techo de la entrada de un edificio, flanqueada por carritos de supermercado con sus pertenencias. Se dirigía a un centro cercano para ducharse, pero por un momento el frío pareció abrumarla.

“No me puedo mover”, dijo Hopkins. “La lluvia, no lo permite”.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí

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