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Si se hace una prueba de coronavirus en casa, ¿quién realiza el seguimiento de resultados? Probablemente nadie

Manos sosteniendo pruebas rápidas de antígenos COVID-19 de iHealth
Kits de prueba de coronavirus en el hogar se entregan en Chelsea, Massachusetts.
(Joseph Prezioso / AFP/Getty Images)
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La propagación -similar a la de un incendio forestal- de la variante Ómicron puede haberlo inspirado, como muchos californianos, a comprar algunos kits de prueba rápida de coronavirus, si es que pudo encontrarlos, claro.

Y si comenzó a preocuparse de haber contraído el patógeno, es posible que haya puesto en uso uno de esos kits. Limpió cuidadosamente el interior de ambas fosas nasales, mezcló la muestra con unas gotas de reactivo, la colocó en una tira reactiva y esperó 15 minutos para ver los resultados.

Pero después de hacer todo eso, y suspirar de alivio o de consternación, puede que haya pasado por alto la última instrucción del kit: informar sus resultados.

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Algunos kits de prueba le recomiendan que llame a su proveedor de atención médica. Otros le piden que use la aplicación del creador de pruebas.

“Las pruebas en el hogar conducen a una marcada subestimación del número de casos”, destacó en un correo electrónico el Dr. Robert Wachter, presidente del Departamento de Medicina de UC San Francisco. “Claramente, muchos cientos de miles de personas ahora se están diagnosticando a sí mismos con pruebas caseras positivas (generalmente con síntomas) y estos no se informan”.

Incluso si intenta informar sus resultados, no es probable que la información mueva la aguja de la comprensión del virus por parte del público. Eso se debe a que no están incluidos en los datos que utilizan los funcionarios de salud para producir sus informes y políticas.

Por tanto, cuantas más personas se hagan la prueba en casa, menos cifras oficiales sobre nuevas infecciones y tasas de positividad proporcionarán una imagen precisa de la salud pública.

Eso no es necesariamente malo, solo una advertencia sobre los datos en los que confiamos mientras recorremos la pandemia.

Los expertos señalan que siempre ha habido una desconexión entre los recuentos de casos de coronavirus reportados y la verdad. Debido a que muchas personas que contraen el virus experimentan pocos o ningún síntoma, una gran cantidad de infecciones no se informan.

De manera similar, las tasas de positividad de las pruebas tienden a aumentar porque las personas con más probabilidades de presentarse en un centro de pruebas son las que tienen síntomas similares al COVID-19. Las grandes organizaciones que requieren que todos sus miembros se sometan a pruebas con regularidad, invariablemente tienen tasas de positividad más bajas que los sitios que solo evalúan a aquellos que piensan que podrían estar enfermos.

Examinar a más personas con mayor frecuencia, como lo hacen otros países desarrollados, podría ayudar a identificar brotes y limitar su propagación. Pero por diferentes razones, la creciente dependencia de los kits de pruebas rápidas en el hogar puede no ayudar a los funcionarios de salud pública en su batalla para rastrear y comprender la pandemia.

Hay varias situaciones que pueden hacer que las personas usen pruebas. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) sugieren que realizar una autoevaluación “si tiene síntomas de COVID-19 o ha estado expuesto o potencialmente expuesto a alguien con la enfermedad” (los síntomas a tener en cuenta, señalan los CDC, incluyen fiebre o escalofríos, tos, dificultad para respirar, fatiga y dolor de garganta).

Otro buen momento de autoevaluación, advierte la agencia, es antes de reunirse con personas que corren un mayor riesgo de infectarse, como quienes no están vacunadas, los adultos mayores o quienes tienen el sistema inmunológico debilitado. O tal vez desee asistir a un evento que requiera la presentación de un resultado negativo.

¿Qué se hace después de realizado el examen? Si el resultado es positivo, los funcionarios de salud dicen que debe aislarse en su casa, alertar a las personas con las que ha estado en contacto cercano e informar a su proveedor de atención médica. El Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles también tiene una línea directa —(833) 540-0473— si tiene preguntas, necesita referencias o ayuda para notificar a sus contactos cercanos.

Una portavoz del departamento remarcó: “Documentaremos y entrevistaremos a quienes nos llamen con resultados positivos”. Pero la entidad no quiere ser contactada por resultados negativos.

Por lo general, los funcionarios de salud tampoco incluyen los resultados de las pruebas caseras en los recuentos de casos confirmados. Una razón es que los tests de bajo costo son pruebas de antígenos, mientras que las clínicas y los centros de pruebas de los condados utilizan pruebas de reacción en cadena de la polimerasa, que son mejores para detectar infecciones en sus primeras etapas.

Luego está la cuestión de si las personas que realizan pruebas en casa las utilizan correctamente o informan los resultados con precisión.

“La verificación de los resultados es un gran problema” para las pruebas rápidas en el hogar, expresó Gigi Kwik Gronvall, investigadora principal del Centro Johns Hopkins para la Seguridad de la Salud. Es por eso que si necesita un resultado de prueba de coronavirus para abordar un avión, añadió, “debe tener una prueba de PCR realizada en un laboratorio o puede ir a un sitio que podría proporcionarle una prueba [de antígeno] verificada; alguien que lo haga por usted y que sepa que se hizo correctamente”.

Después de algunas confusiones iniciales, los estados ahora informan los resultados de las pruebas de antígenos que recopilan por separado de los resultados de la PCR, comentó Gronvall.

La Dra. Sara H. Cody, funcionaria de salud y directora de salud pública del condado de Santa Clara, estuvo de acuerdo con Wachter en que las nuevas infecciones informadas por las autoridades de salud cada día son “un recuento insuficiente”. Pero eso puede no ser un inconveniente tan grande como lo hubiera sido al comienzo de la pandemia.

En ese entonces, remarcó Cody, los funcionarios de salud “siguieron cada caso con mucho cuidado” porque “realmente importaba para nuestra comprensión de la pandemia y para informar nuestras decisiones políticas”. Pero ahora, destacó, “estamos en un momento bastante diferente”.

Incluso con pruebas limitadas, los funcionarios saben que el recuento de casos aumentará rápidamente debido a la variante Ómicron.

“Lo que es más importante para nosotros ahora es que medimos los recursos de nuestro hospital”, señaló, para asegurarnos de que las personas que necesitan atención aguda puedan tenerla. Y con las altas tasas de vacunación y refuerzos en los condados, agregó Cody, es difícil saber en este momento cuántos de los nuevos infectados eventualmente necesitarán una cama de hospital.

Wachter, Cody y otros expertos en salud coincidieron con que el enfoque de quienes formulan las políticas se está alejando de los recuentos de casos reportados hacia otras medidas, como las hospitalizaciones y las tasas de positividad.

Por supuesto, las tasas de positividad varían por la exclusión de los resultados de las pruebas en el hogar. Pero para Cody aún es significativo tener una comparación de la una con la otra en relación a las tasas de pruebas positivas a lo largo del tiempo.

El condado de Santa Clara ha estado haciendo alrededor de 20.000 pruebas por día, y su índice de positividad fue de un aproximado del 1.5% a principios de diciembre, destacó la funcionaria. Hasta el martes, precisó, era casi del 10.5%.

A pesar de los problemas de datos que crean, las pruebas de antígenos en el hogar siguen siendo un complemento importante de las pruebas de PCR, agregó. Alertan a quienes necesitan aislarse y “reducen las posibilidades de que sigan infectando a otros, lo cual es importante en general para la salud pública”.

Además, según el departamento de salud del condado de Los Ángeles, los recuentos de casos de coronavirus no son tan significativos como las tendencias que revelan. “Como ocurre con muchas enfermedades notificables, las cifras informadas nunca capturan todos los casos”, destacó una portavoz del departamento. “Pero nos han proporcionado una tendencia para comprender mejor lo que está sucediendo y modelar lo que probablemente sean las cifras más precisas”.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí

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