Anuncio

¿Puede un inmigrante con antecedentes penales obtener su Green Card?

Héctor Bonilla presume su tarjeta verde tras una larga lucha con las autoridades.
(Selene Rivera)
Share via

Héctor Bonilla estuvo al borde de la deportación por conducir supuestamente drogado y traer a sus hijas menores en su auto. Este error se convirtió en una pesadilla que duró varios años para el inmigrante, quien tuvo que enfrentar la cárcel, una lucha grande para recuperar a sus tres hijas y finalmente poder obtener la residencia legal en Estados Unidos.

Recientemente, mientras Bonilla veía su tarjeta verde, con los ojos aguados dijo estar arrepentido por sus acciones y tener una profundo agradecimiento por la oportunidad que las autoridades de inmigración le dieron, para obtener este preciado permiso de permanecer y trabajar en Estados Unidos legalmente.

En el corazón de Oaxaca, México, donde los vibrantes paisajes se bañan con el cálido resplandor del sol, existe una belleza que trasciende el tiempo y el espacio: la belleza de la música oaxaqueña.

Las autoridades del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) pueden negar la petición de una tarjeta verde si la persona no cumple con ciertos requisitos, uno de ellos es tener antecedentes penales limpios.

Anuncio

Según los expertos en inmmigración, cada caso es diferente, pero los antecedentes penales no siempre impedirán que un inmigrante obtenga un estatus legal. Una representación adecuada ante el tribunal penal y de inmigración es integral.

“En aquel entonces yo estaba deprimido porque no encontraba trabajo y tenía que mantener a mi familia. Yo recurrí a las drogas como una medida de olvidar mis problemas y mi familia tuvo que pagar por eso”, dijo Bonilla, quien llegó a los Estados Unidos como menor no acompañado en el año 2000.

Más de tres decenas de destacados grupos latinos, de derechos civiles, religiosos y pro inmigrantes dentro de Estados Unidos, dan a conocer un plan que describe cinco prioridades críticas necesarias para que el gobierno de Biden pueda asegurar sus votos.

Héctor conoció a su esposa en el Este de Los Ángeles y procreó a tres hijas de ahora 13, 10 y 8 años y a un varoncito de 9 meses.

La odisea de Héctor comenzó a principios del 2018, con una parada de tránsito en donde el agente percibió que había consumido algún tipo de droga y lo arrestó. En el auto se encontraban sus tres hijas que fueron separadas de su padre y enviadas al sistema de cuidado infantil.

“Yo trabajaba como jornalero, pero la mayoría de veces no había trabajo y nunca pensé en las consecuencias de mis actos. Al momento que las autoridades se llevaron a mis hijas, pensé que nunca las vería otra vez. Fue entonces cuando decidí empezar mi cambio de vida”, dijo.

El cuidado de enfermos en el hogar es posible con entrenamiento gratis y estipendio en California

Como parte de esa lucha, Bonilla logró salir de la cárcel seis meses después de su arresto, pero fue transferido al centro de detención de inmigración de Mesa Verde otros seis meses. Como indocumentado, Bonilla afirma que lo presionaron para firmar una salida voluntaria del país, pero se negó y fue así como empezó su peregrinar por cortes migratorias durante un periodo de cuatro años.

Para el 2019, al salir de Mesa Verde tras pagar una multa de 10,000 dólares, Bonilla decidió someter la residencia permanente con la petición de su esposa y el beneficio de la 245-I para no salir del país. La pareja podía visitar a sus hijas durante los fines de semana, un proceso doloroso que finalmente concluyó cuando sus hijas fueron devueltas a principios del 2020.

Gracias a la caridad de una iglesia cristiana, los cinco vivieron en una habitación durante varios meses hasta que una organización no lucrativa les facilitó un departamento de dos recámaras.

El caso de Bonilla, de 37 años, es ejemplar y extraordinario, porque tuvo que mostrarle a las autoridades arrepentimiento de sus hechos, y tuvo que tomar numerosas clases para librarse de sus adicciones y clases para padres de familia, todo esto durante cuatro años.

Sin embargo, eso no es suficiente para las autoridades de inmigrancion, dijo el abogado Sergio Siderman, quien llevó su caso.

“Dependiendo del tipo de antecedentes penales que tenga un inmigrante, podría ser útil anular o eliminar delitos de su registro”, dijo el abogado.

El experto también recomienda que los interesados obten un FOIA, La Ley de Libertad de Información (Freedom of Information Act), fue promulgada en el año 1966, refiere que cualquier persona dentro de los Estados Unidos tiene el derecho de obtener acceso a registros federales, excepto cuando estos estén protegidos contra la divulgación pública por algunas exenciones relacionadas con el orden público o la seguridad nacional.

Cualquier persona, sea esta ciudadana o no, puede solicitarlo. FOIA es una valiosa herramienta para los casos de inmmigración, ya que con esta, el abogado puede conocer toda la historia migratoria del solicitante.

Por este motivo, tener un abogado de inmigración con experiencia que revise estos registros, y buscar la asistencia de un abogado penalista con experiencia en estos casos, puede ayudarle demasiado a una persona a avanzar su documentación, dijo el abogado.

¿Cuál sería su consejo para los inmigrantes indocumentados con antecedentes que puedan obtener la residencia a través de una petición familiar?

“El consejo para aquellos con antecedentes penales es siempre asegurarse de ejecutar su FOIA, para que tengan un registro completo de su historial real, porque ese será un factor determinante enorme en cómo una petición familiar puede ayudarlos a obtener la residencia, o cualquier otra forma de alivio”, dijo el abogado.

Anuncio