Anuncio

Hombre de 83 años y su hijo viven en un estadio mientras se mantienen alejados del coronavirus

Andrés Perales y su hijo ‘Andy’ viven en el Estadio La Rosaleda en la municipalidad de Málaga, en el sur de España

Share via

España es uno de los países que ha sido golpeado fuertemente por el Covid-19, por lo que con la cuarentena impuesta a sus habitantes se busca evitar una mayor propagación del virus que azota la Tierra. Los estadios, arenas, recintos deportivos están vacíos en su totalidad… bueno casi todos.

Andrés Perales, de 83 años, se encuentra confinado en su hogar, que es lo suficientemente grande para abarcar a 30,044 personas al mismo tiempo. Su domicilio es un estadio en la municipalidad de Málaga, en el sur de España.

Perales, junto a su hijo Andrés Jr., viven y cuidan del Estadio La Rosaleda del FC Málaga. Perales ha ocupado varias posiciones en el inmueble desde que empezó a trabajar ahí en 1966, ha sido: chófer, jardinero, conserje, delegado de campo, vigilante de seguridad y hasta masajista. Aunque es jubilado, Perales cuida del estadio y ha hecho de ella su residencia.

Anuncio

Ambos tienen su espacio apenas al pasar la puerta de entrada por donde proceden los vehículos que entran al estadio.

“Somos afortunados dentro del confinamiento, poderlo hacer en un lugar privilegiado”, dijo ‘Andy’, quien es uno de los siete hijos de Andrés. “Mis hermanas y yo participamos en la desinfección del estadio, ¡es la limpieza de nuestra casa a lo grande!”.

Por su parte, Andrés dijo que lo más similar a lo que vive hoy en el estadio, fue cuando el desaparecido CD Málaga sufrió un embargo por las deudas que dejó la Copa Mundial de España 1982. En ese entonces su esposa lo acompañaba. En ese entonces, Andrés cuidaba del césped del estadio e incluso usaba sus propios medios para mantenerlo.

“Fue una temporada dura, no contábamos con ingresos por la incertidumbre del club”, dijo ‘Andy’. “Él trabajaba por las noches en un taxi que un amigo le dejaba, así entraba algún dinero en casa. Con el taxi podía comprar gasoil para abastecer a las máquinas del césped. Papá se encargaba de cortarlo y mantenerlo hasta que llegase una nueva directiva. Gracias a Dios todo cambió”.

A pesar de la situación que viven los dos, tratan de mantener una mentalidad positiva.

“Somos malaguistas, siempre remontamos. Mucho ánimo y compromiso, entre todos podremos salir de esta”, afirmó ‘Andy’.

Anuncio