Margarito recuerda su error ante Pacquiao y lamenta cómo acusaciones de vendaje ilegal dañaron su carrera

El controversial Antonio Margarito peleó por última vez en 2017 cuando ganó una contienda por decisión técnica después de sufrir una cortada ante Carson Jones. Ese fue el breve regreso del “Tornado de Tijuana” pero que luego se retiró definitivamente para pasar más tiempo con su familia.

Después de su derrota ante Manny Pacquiao en 2010 y luego ante Miguel Cotto en 2011, el tijuanense decidió colgar los guantes por cinco años para luego hacer dos peleas adicionales, ante Jorge Paez Jr. y Ramón Álvarez en 2016, las cuales ganó.

Durante una entrevista con LA Times en Español en Los Angeles, Margarito dijo que su mejor rival en su destacada carrera fue Manny Pacquiao y que se equivocó en pensar que lo iba a poder noquear debido a su mayor peso.

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“Cuando vi que Pacquiao estaba invadiendo los pesos, me dije, ‘No importa, aunque me dé siete golpes por uno, cuando yo lo agarre, por mi peso, con mi fuerza, por mi estatura, por lo que quieras (lo iba a noquear)’. Pero estaba muy equivocado”, declaró Margarito, quien resultó en aquella contienda con una lesión grave en el hueso orbital.

En 2009, su carrera y su reputación sufrieron un duro golpe ante Shane Mosley en el entonces Staples Center pues previo al combate, el cual perdió por nocaut en el noveno asalto, se le descubrió una especie de yeso en uno de sus vendajes. Después de eso, peleadores como Cotto lo acusaron de usar ese vendaje ilegal en sus contiendas y al final se le suspendió la licencia por un año, al igual que a su entrenador Javier Capetillo.

Margarito tiene actualmente un canal de YouTube en el que habla de boxeo y su esposa comparte consejos de fitness. De boxeo, Margarito dijo que no se ha subido al ring pero que eso podría cambiar si hay una pelea interesante.

Actualmente goza de la compañía de sus hijos, Antonella, de 9 años, y Antonio Margarito Jr., de 8.