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San Diego reduce tarifas para la construcción de viviendas anexas

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San Diego Union-Tribune

Las tarifas para construir viviendas anexas o granny flats, que a menudo son casi iguales a las de construcción, se reducirán drásticamente en virtud de la legislación aprobada por unanimidad por el consejo municipal de San Diego esta semana.

El objetivo es ayudar a aliviar la escasez severa de viviendas asequibles estimulando la construcción de más viviendas anexas, que son unidades de vivienda adicionales en una propiedad existente.

Los apartamentos anexos son más populares en todo el país como una forma innovadora de crear más viviendas sin más tierra o infraestructura, lo que los convierte en la forma más rápida y económica de aumentar el suministro local de viviendas asequibles.

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Se consideran ideales para los recién graduados universitarios, los jóvenes con empleos poco remunerados y las personas de la tercera edad con ingresos fijos.

San Diego ha visto mucha menos construcción de viviendas anexas que otras ciudades importantes de California desde que el estado relajó las regulaciones en 2016, y los funcionarios de la ciudad dicen que probablemente sea porque San Diego cobra tarifas que están entre las más altas.

Hasta noviembre pasado, San Diego tuvo 64 aplicaciones para viviendas anexas en comparación con 1980 en Los Ángeles, 593 en San Francisco, 247 en Oakland, 166 en San José y 34 en Sacramento.

Las cuotas para construir una vivienda anexa en San Diego, que varían según el vecindario, generalmente oscilan entre 30 mil y 49 mil dólares por unidad. La nueva legislación reduce eso hasta en un 50 por ciento dependiendo de una variedad de factores.

La legislación elimina las tarifas de agua y alcantarillado y una tarifa de desarrollo basada en el plan general de la ciudad.

También reduce, pero no elimina, las tarifas para ayudar a financiar los servicios necesarios para atender nuevas viviendas, como estaciones de bomberos, sucursales de bibliotecas, parques y carreteras ampliadas.

Los funcionarios de la ciudad también planean solicitar el permiso de la agencia de planificación regional del condado, la Asociación de Gobiernos de San Diego, para renunciar a las contribuciones al Programa Regional de Mejora de la Congestión del Transporte.

El razonamiento detrás de la exención es que las viviendas anexas encajan con el objetivo de fomentar el crecimiento inteligente, en el que se construyen nuevas viviendas a lo largo de corredores de transporte para evitar la congestión atribuida a la expansión urbana.

La legislación para reducir drásticamente los aranceles, que el consejo aprobó el lunes, llega casi un año después de que el ayuntamiento suavizara la zonificación y otras regulaciones sobre las viviendas anexas. Se espera que la reducción surta efecto dentro de dos años.

Sobre la base de la legislación estatal que facilitó las normas de estacionamiento y las normas que requieren grandes áreas de amortiguación entre las estructuras y las líneas de propiedad, el consejo redujo aún más las normas de estacionamiento y aumentó el tamaño máximo de una vivienda anexa.

La legislación de la ciudad no requiere que el propietario del predio con una vivienda anexa viva allí, pero los inquilinos deben permanecer al menos 30 días para que sea más difícil para las viviendas anexas convertirse en alquileres de vacaciones a corto plazo.

“La burocracia de la ciudad se mostró un poco más reacia a las tarifas que a cambiar el código, pero finalmente lo hicimos llegar al consejo”, dijo el concejal Scott Sherman de Allied Gardens por teléfono el martes.

El siguiente paso clave, dijo Sherman, es que la ciudad cree plantillas de diseño previamente aprobadas que acelerarán las aprobaciones y limitarán los costos de arquitectura para las viviendas anexas.

“Todavía tendrían la opción de hacer algo personalizado por su cuenta, o pueden elegir que hay algo previamente aprobado que ayudará a ahorrar tiempo y dinero”, dijo Sherman, y señaló que las plantillas necesitarían la aprobación del consejo. “Les da flexibilidad”.

La reducción de la tarifa le costaría a la ciudad un estimado de 900 mil dólares por año si se construyen 100 apartamentos anexos.

Pero la ciudad solo se perderá los posibles ingresos, sin perder dinero que ya recauda, porque en los últimos años se han construido pocas viviendas anexas.

Una encuesta reciente de las 236 mil viviendas unifamiliares de la ciudad estimó que se podrían construir de 2 mil a 6 mil apartamentos anexos durante la próxima década.

“Una de las formas más rápidas y menos costosas en que podemos aumentar la vivienda asequible en San Diego es facilitar la construcción de viviendas anexas”, dijo el alcalde Kevin Faulconer en un comunicado de prensa. “Con estos nuevos incentivos, estamos eliminando barreras para alentar la construcción de nuevas unidades que los residentes de San Diego realmente puedan pagar”.

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La concejala Georgette Gómez de City Heights dijo que las viviendas anexas son viviendas subsidiadas para residentes de bajos ingresos, sin el subsidio.

“Esperemos que se soliciten más permisos para desarrollar más de estas unidades que serán naturalmente asequibles”, dijo durante la reunión del lunes.

Sherman estuvo de acuerdo.

“No va a resolver el problema de la noche a la mañana, pero lo hará mucho más fácil”, dijo.

Mary Lydon, quien encabeza una coalición de grupos ambientales, empresariales y laborales llamada Housing You Matters, elogió la nueva legislación el lunes.

“Esta es una política que ayudará a los ciudadanos promedio en la ciudad de San Diego a capacitarse para construir sus propias unidades asequibles”, dijo Lydon.

El año pasado San Diego tomó medidas adicionales para estimular la construcción de viviendas para personas de bajos y medianos ingresos, incluyendo un desarrollo más rápido y revisiones ambientales, más dinero para viviendas subsidiadas y bonos ampliados para proyectos densos y aquellos en áreas con prioridad de tránsito.

Garrick escribe para el U-T.

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