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Las muertes por COVID-19 en Estados Unidos rebasan las 3.000 diarias, más que el Día D o el 11 de septiembre

A girl kneels on grass as she writes the name of her grandmother on a cardboard headstone.
Kyla Harris, de 10 años, escribe un homenaje a su abuela Patsy Gilreath Moore, quien murió de COVID-19, en un cementerio simbólico en Miami, el 24 de noviembre.
(Lynne Sladky / Associated Press)
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Precisamente cuando Estados Unidos parece estar a punto de lanzar una vacuna para el COVID-19, las cifras se han vuelto más sombrías que nunca: arriba de 3.000 muertes diarias, más que el Día D o el 11 de septiembre. Un millón de casos nuevos en el lapso de cinco días. Más de 106.000 personas en el hospital.

La crisis en todo el país está llevando a los hospitales al límite y dejando a los miembros del personal y a los funcionarios de salud pública exhaustos e invadidos de lágrimas y pesadillas.

En total, la crisis ha provocado más de 290.000 defunciones en todo el país, con más de 15 millones de contagios confirmados.

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Estados Unidos registró 3.124 decesos el miércoles, el total de un día más alto hasta el momento, según la Universidad Johns Hopkins. Hasta la semana pasada, el pico era de 2.603 muertes el 15 de abril, cuando la ciudad de Nueva York fue el epicentro del brote en la nación.

El número de víctimas del miércoles eclipsó los fallecimientos estadounidenses en el primer día de la invasión de Normandía durante la Segunda Guerra Mundial: 2.500, de unos 4.400 aliados muertos. Y superó la cifra de decesos del 11 de septiembre de 2001: 2.977.

Los casos nuevos por día se registran en máximos históricos de más de 209.000 en promedio. Y la cantidad de personas en el hospital con COVID-19 está estableciendo récords casi todos los días.

Un panel asesor del gobierno de Estados Unidos se reunió el jueves para decidir si respalda el uso masivo de la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer para ayudar a vencer el brote. Dependiendo de qué tan rápido la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) apruebe la recomendación del panel, las inyecciones podrían comenzar en unos días, inaugurando la mayor campaña de vacunación en la historia de EE.UU.

En St. Louis, el terapeuta respiratorio Joe Kowalczyk señaló que había visto pisos enteros de su hospital llenarse de pacientes con coronavirus, en momentos se ubicaban dos de ellos por habitación. Dijo que el suministro de ventiladores estaba disminuyendo; el inventario es tan escaso que los colegas de un turno tuvieron que auxiliar a un paciente usando una máquina BiPAP, similar a los dispositivos que se usan para tratar la apnea del sueño.

Cuando se va a casa a dormir durante el día, al final de sus fatigosos turnos durante la noche, a veces tiene pesadillas.

“Estoy durmiendo y trabajando en una unidad. Las cosas salen completamente mal y despierto en shock. Son muy viscerales y vívidas [las pesadillas]”, relató. “Realmente me asusto”.

En Nueva Orleans, la directora de salud de la ciudad, la Dra. Jennifer Avegno, describió una visita reciente a un hospital donde observó a médicos, enfermeras, terapeutas respiratorios y otras personas que se arriesgaban a exponerse a la enfermedad, en un intento largo e inútil de salvar a un paciente moribundo con COVID-19. Algunos rompieron a llorar después, comentó.

“Se trata de personal experimentado de cuidados intensivos y de emergencia”, explicó. “No lloramos muy comúnmente, menos varios de nosotros a la vez”.

Ella citó “el puro agotamiento de dar todo por pacientes similares una y otra vez durante los últimos nueve meses, junto con el conocimiento de que gran parte de esto podría prevenirse con medidas realmente simples”.

En Virginia, el gobernador Ralph Northam, médico de formación, anunció un toque de queda a medianoche y reglas para el uso de cubrebocas ampliadas, para exigir su utilización en exteriores, no solo en interiores.

Mientras tanto, Ellen DeGeneres se convirtió en una de las últimas celebridades en infectarse con el virus, aunque indicó que “se siente bien en este momento”. La producción de su programa de entrevistas se suspendió hasta enero y, mientras tanto, se emitirán retransmisiones.

Para leer esta nota en inglés haga clic aquí

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