El legendario actor de voces Jim Cummings encuentra una nueva forma de darle vida a Winnie Pooh y Tiger

Pese a que ni su rostro ni su nombre son reconocidos de manera inmediata por la mayoría de la audiencia, Jim Cummings es una eminencia del mundo del entretenimiento debido a su larga carrera como intérprete de las voces de muchos personajes animados.

Hace ya tres décadas, el profesional de 65 años empezó a hacerse cargo de lo que salía de las bocas de Winnie Pooh y Tiger tanto en las series de televisión como en las películas relacionadas a estas memorables criaturas, y ahora, él mismo repite la faena en un formato realmente novedoso gracias a su participación en “Christopher Robin”, la primera incursión de la franquicia en los terrenos de la ‘acción real’.

“Estoy muy emocionado con esta ‘reimaginación’ de la historia”, nos dijo recientemente Cummings. “No puedes equivocarte con Ewan [McGregor, el conocido actor que hace de Christopher]; y [el director] Marc Forster tenía una visión maravillosa al querer mostrar a este personaje que todos conocimos como un niño, pero que ahora es un adulto con los problemas a los que nos enfrentamos todos y que recibe de manera inesperada la visita de sus antiguos amigos, quienes están decididos a salvarlo y a devolverlo al mundo de fantasía que tenía en el pasado”.

“Cuando creces, puedes caer en una rutina agobiante, seas un cirujano o un lustrabotas, y caer en preocupaciones que a veces ni siquiera valen la pena”, agregó. “Nada de eso importa en el Bosque de los Cien Acres; lo que importa ahí es el despertar de tu imaginación. Estoy seguro de que esta película hará que todos los que la vean se alejen completamente de sus problemas cotidianos, al menos por un momento”.

Como ya lo dijimos, no mostrar el rostro reduce el nivel de fama, aunque tiene una ventaja clara: poder seguir interpretando la voz de un mismo personaje después de mucho tiempo. “Es cierto; amo lo que hago”, admitió el actor originario de Ohio. “Pero te aseguro que lo mejor de esto es la felicidad y la dulzura que le brinda a las personas. Agradezco todos los días a Dios por poder hacer esto y por haberme dejado participar ahora en un proyecto que ha encontrado una manera distinta de narrar estas aventuras”.

En vista de que este era un filme con actores de carne y hueso y con una orientación más compleja, el proceso habitual de la grabación de voces fue distinto. “No hice mis partes con la explosividad con que lo hago para un programa de televisión del sábado por la mañana; Marc me pidió que fuera mucho más sutil”, describió Cummings. “La historia se desarrolla entre 1920 y los años ‘40, es decir, durante una época difícil, y sus escenas no son tan espectaculares como las de los dibujos animados, porque la intención era ir más hacia el corazón que hacia el plano de la acción, que tampoco falta”.

Nuestro entrevistado no se siente preocupado en lo que respecta a la reacción que puedan tener los espectadores al ver por primera vez a estos seres de fantasía en versiones que simulan ser de carne y hueso. “Ya ha habido muchos comentarios sobre los diseños originales, las fotos del rodaje y finalmente los tráilers, y todo el mundo parece estar fascinado”, aseguró. “Creo que nos va a ir muy bien”.