La buena estrella en el cine de José José

Fue “El Príncipe de la Canción” de la música, y aunque en cine no obtuvo un título nobiliario, José José debutó con buena estrella.

Al poco tiempo de que su voz resonó en los escenarios, los productores decidieron aprovechar su popularidad en pantalla grande. Casi a la par del lanzamiento de su álbum Buscando una Sonrisa (1971), el cantante debutó con la cinta del mismo nombre junto a Nadia Milton y Fernando Luján.

Meses después llegó su mejor historia de los 70: Un Sueño de Amor (1972), junto a Verónica Castro y Sasha Montenegro. Rubén Galindo fue el realizador de ambas producciones y quien creyó en él como actor.

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Su tercer protagónico fue la comedia con Nubia Martí, La Carrera del Millón (1974), también bajo la dirección del propio Galindo, quien no quería dejarlo ir. Sus compromisos musicales iban en aumento, por lo que el cine tuvo que esperar. Formó parte del mundo de las fotonovelas, en donde hizo uno de su primeros trabajos al lado de Anel, quien sería su esposa durante varios años y madre de sus hijos Marysol y José Joel.

Tuvo actuaciones especiales en los filmes La Discoteca del Amor (1980) y Siempre en Domingo (1984, interpretándose a sí mismo).

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Sus últimos tres estelares serían Gavilán o Paloma (1985), junto a Christian Bach y Gina Romand, quizá la más exitosa de todas. También hizo Sabor a Mí (1988), con Angélica Aragón; y Perdóname Todo (1995), al lado de Alejandra Ávalos.

En todas ellas demostrando su privilegiada voz. Tras varios años de sufrir por una afección en la garganta, la productora Rosy Ocampo lo contrató como pareja de Angélica María y papá de Angélica Vale en la telenovela La Fea más Bella (2007), que obtuvo uno de los mejores ratings de esa década.

Pero por encima de cualquier personaje en cine o televisión, la mejor actuación de José José se dio sobre un escenario, en tiempos en los que cantar en vivo era la máxima demostración de arte de un intérprete.