Muere el creador de ‘Armando Hoyos’

Después de 59 años en los que no paró de subir niveles en los escenarios de la comedia y los videojuegos en México, el escritor, productor y conductor Gus Rodríguez terminó su partida.

La noche del viernes, el pionero geek y responsable de los guiones de los inicios televisivos de Eugenio Derbez, falleció en un hospital por complicaciones con medicamentos, según su hijo Gustavo Javier Rodríguez.

Gus fue internado por el cáncer de pulmón que padecía, mismo que anunció por Twitter el 24 de octubre de 2019 como una enfermedad pulmonar que lo atacó repentinamente, ante la que no se dejó vencer. “Le estaba echando ganas, aunque le costaba trabajo nunca perdió el ánimo, no le gustaba sentirse débil”, comentó su hijo, en entrevista telefónica.

Aunque era publicista, incluso sugirió nombrar “Me Late” al sorteo de Pronósticos, Gus destacó principalmente en televisión como guionista de Al Derecho y al Derbez y Derbez en Cuando.

“Murió uno de mis más grandes amigos y compañeros de vida. Mi cómplice, mi amigo, mi hermano. Creador de Armando Hoyos, entre otros personajes. Sin él no sería lo que ahora soy”, lamentó Derbez en Twitter.

Además de escribir, Gus aparecía en pantalla, pero el público noventero lo recuerda hablando de videojuegos en Nintendomanía. Junto a su hijo Gustavo Javier, entonces un niño, Gus daba tips para diferentes juegos y le hablaba al televidente de tú, como también lo hizo en la revista Club Nintendo, que fundó en 1991 y que se publicó cada mes hasta febrero de 2019.

Como productor, su crédito más reciente lo mostró en Renta Congelada, aunque también adaptó guiones como el del doblaje de Mortadelo y Filemón contra Jimmy El Locuaz, y dirigió Vecinos.

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“Lo recuerdo como un eterno niño. Tenía un gran sentido del humor, era creativo y le encantaba jugar con el lenguaje para darle un nuevo significado a través de ideas; estaba metido en muchísimos proyectos”, recordó Lalo España.

Como defensor de que siempre hay una recompensa más allá del “game over”, su hijo afirmó que incluso le habría encantado ver que su deceso fue tendencia en Twitter. “Seré una luciérnaga. Y en uno de mis valles quiero que estén mis cenizas, en el Santuario de las Luciérnagas”, se lee en una publicación póstuma en Instagram, sin atribuir autoría.

El cuerpo de Gus fue velado ayer en una funeraria del sur de la CDMX antes de ser cremado, a las 17:00 horas. Debido a la pandemia, sólo se autorizaba la permanencia de 20 personas en la sala a la vez, sin extenderse por más de tres horas; se recomendaba no dar abrazos.