Reporte: El rapero que disolvió en ácido a los estudiantes en México
Omar ‘N’, rapero conocido como ‘QBA’, confesó haber colaborado en la desaparición de los tres estudiantes de cine y de disolver sus cadáveres en ácido clorhídrico, informó la Fiscalía de Jalisco.
Los tres estudiantes de cine desaparecidos en marzo, cuyos cuerpos fueron disueltos en ácido, son las últimas víctimas de la lucha entre distintos grupos del crimen organizado en México y la violencia resultante ha provocado la desaparición de más de 30,000 personas en todo el país en la última década.
En el expediente está registrado que ‘QBA’ declaró ser un rapero famoso; el canal ‘QBA OFICIAL’ en YouTube tenía 121 mil 148 suscriptores hasta el cierre de esta edición, y su video ‘Me Gusta Caminar por el Vecindario’, 5,5 millones de reproducciones.
En la canción ‘Que Descansen en Paz’, el rapero canta frente a un hombre atado de manos y con la cabeza tapada que trata de liberarse y al final le prende fuego.
Omar ‘N’ confesó junto con Gerardo ‘N’ haberse encargado personalmente del proceso químico, según la Fiscalía de Jalisco, en una finca en Tonalá, que la semana pasada fue cateada.
En redes sociales, muchos seguidores del rapero le han manifestado su apoyo.
‘QBA’ es una de las dos personas que han sido detenidas de las 8 que al menos participaron en la desaparición de los estudiantes, de acuerdo a las autoridades de Jalisco, que con discursos -igual que el presidente Enrique Peña Nieto- intentan maquillar su fracaso en seguridad ante criminales que se adueñan poco a poco de regiones enteras.
Los fiscales del estado de Jalisco, donde ocurrieron los hechos, explicaron que los jóvenes fueron secuestrados por el cártel de Jalisco Nueva Generación, una de las organizaciones criminales más poderosas del país en estos momentos, porque los confundieron con miembros de un grupo rival.
Y aunque deshacer los cuerpos es una táctica utilizada por la delincuencia para desaparecer a sus víctimas, la constatación de que éste fue el destino de unos jóvenes impactó con fuerza en México, donde las autoridades fueron exhibidas una vez más por su inoperancia.
Los estudiantes de la Universidad de Medios Audiovisuales identificados como Javier Salomón Aceves Gastélum, Jesús Daniel Díaz García y Marco Francisco García Ávalos, estaban filmando un proyecto para su escuela en una vivienda en las afueras de la ciudad de Guadalajara, una casa que era de la tía de uno de ellos y había sido utilizada por un grupo criminal antagónico llamado Nueva Plaza.
Reportes indican que luego de grabar su proyecto escolar, los jóvenes subieron a un auto y fueron interceptados por seis individuos fuertemente armados que se identificaron como personal de la fiscalía y se los llevaron porque los confundieron con miembros de un grupo rival.
El comando en realidad pertenece al cártel de Jalisco Nueva Generación, una de las organizaciones criminales más poderosas de México en estos momentos.
Uno de los estudiantes fue asesinado a golpes. A los otros dos los mataron después de torturaros. Sus captores querían sacarles información.
Los tres cadáveres fueron llevados a una tercera ubicación donde presumiblemente fueron disueltos en ácido sulfúrico.
La fiscalía encontró 46 barriles, algunos con restos de ácido y halló “material biológico” y manchas de sangre de donde se pudo hacer pruebas genéticas y cuyo ADN coincidió con el de dos de los estudiantes.
También localizó uniformes, armas y credenciales falsas de policías con las que los atacantes engañaron a las víctimas.
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