¿Puede una camiseta cambiar el mundo?
Daniel DeSure, creador de la popular marca de streetwear Total Luxury Spa, quiere que la moda sea un vehículo para el cambio.
“Este es mi lugar favorito”, afirma Daniel DeSure, señalando el tramo de Exposition Boulevard, en Crenshaw, donde ha vivido y trabajado durante 12 años. Detrás de una fachada gráfica verde oliva y negra, el director creativo y empresario de 40 años de edad dirige Commonwealth Projects, una agencia creativa convocada por Nike, Saint Laurent, MOCA y USC para desarrollar instalaciones que desafían el género, crear libros de diseño y reimaginar marcas enteras.
Más recientemente, este lugar también se ha convertido en anfitrión de una tienda de skates y de una para el proyecto paralelo de DeSure, que ya lleva cinco años: Total Luxury Spa, una revista convertida en línea de ropa, que está a punto de convertirse en el nuevo nombre familiar de las prendas de calle.
La artesana canadiense Lauren Riihimaki tiene grandes aspiraciones para construir un imperio y una nueva ronda de lanzamientos de productos planeada para los próximos meses -a los que llama LaurDIYDrop- debería ayudarla con ellas.
Después de años de ejecutar visiones para otros, DeSure y su socio, Hassan Rahim, lanzaron Total Luxury Spa en 2014, como un medio de producción creativa más directa. “Simplemente me sentía un poco desconectado. ¿Por qué el trabajo que hago durante el día no puede hablar individualmente de lo que me importa?”, pensó DeSure en ese entonces. El nombre “Spa” fue elegido para generar visiones de revitalización. “Siempre pienso en los libros, la cultura y las cosas en las que estamos trabajando como aquellas con las que me siento lleno”, afirma.
Los dos comenzaron creando revistas tipo fanzine para artistas locales, que estaban fuera del alcance de la representación de galerías y museos. Esas publicaciones estaban pensadas para una distribución fácil y barata, pero descubrieron que las camisetas eran una forma de comunicación aún mejor. “Son una manera rápida de presentar un diseño ante el mundo y las personas que se mueven alrededor de él”, explica DeSure.
En telas negras, blancas y teñidas, las camisetas de Spa anuncian espectáculos falsos de artistas como el músico de jazz Sun Ra, y el violonchelista y cantante y compositor Kelsey Lu. Otras presentan la frase “Crenshaw Wellness”, un término genérico para los mensajes de afrofuturismo, meditación y atención plena, con irónicas imágenes prediseñadas. “Plantas curativas para paisajes lastimados”, reza una camiseta. “Tus preocupaciones desaparecieron”, dice otra.
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DeSure y Rahim utilizaron Spa como un medio para rejuvenecer su vecindario. La ropa está hecha en L.A., y es diseñada, modelada y fotografiada por miembros de la comunidad de Crenshaw. Y, para revertir los pecados del capitalismo, Spa da más de lo que recibe, infundiendo al vecindario recursos, orientación, oportunidades y carreras. “Siempre pienso en la cultura como algo de lo que muchas veces se toma, lo cual significa que las personas toman la estética de otros, pero todo se trata de cómo anteponerse a un sistema”, explica DeSure. “Hay una forma de retribuir a un sistema, para mejorarlo”.
Añadió: “Cuando hacemos una camiseta que dice ‘Crenshaw Wellness’, es en serio. Aquí debería haber bienestar. ¿Cómo lo logramos?”.
Con fondos de Commonwealth Project abrió su estudio al vecindario para brindar clases semanales gratuitas de meditación, que ahora se llevan a cabo todos los lunes en el Underground Museum. Ayudó a iniciar un programa de meditación para niños en la escuela Hillcrest Elementary School, y espera abrir otro este año. En busca de formas adicionales de ser útil, buscó orientación en el parque de patinaje al otro lado de la calle: “Todos se cuidan unos a otros allí. [Los niños] son atendidos por sus compañeros. Siempre lo he respetado”.
DeSure pidió a algunos de los jóvenes skaters locales que compartieran sus opiniones. “Nos sentamos y hablamos”, recuerda. Las conversaciones cubrían aspiraciones personales, profesionales y empresariales, y siempre planteaban la pregunta: ¿Qué necesita el vecindario?
La primera conclusión: “No es el lugar más fácil para encontrar comida sana y barata”. Spa respondió con una camiseta dedicada al restaurante vegano local, Mr. Wisdom, que estaba cerrando. La prenda presentaba la cara del propietario y el lenguaje prestado de un letrero pintado a mano en el restaurante: “Está ingresando a una zona espiritual. Apague todas sus radios y pensamientos negativos”. La camiseta la compraron patinadores de todo el mundo, editores de Vogue y hasta la familia Kardashian. Ya sea que entendieran o no lo que representaba la camiseta, la mitad de las ganancias fueron para el restaurante.
Los chicos, que ahora tienen veinte y tantos años, desarrollaron su propia respuesta: una marca de ropa urbana, de skate y jugos llamada Tropics. Nombrada como un riff en “The Jungle”, un apodo de la cercana Baldwin Village gracias a sus plantaciones tropicales, la compañía de jugos permite a los jóvenes no sólo nutrir a su comunidad, sino también aprender y enseñarse mutuamente cómo construir una marca y manejar un negocio.
Desde su lanzamiento en 2015, con la ayuda de la tutoría, la financiación y el espacio de oficinas de DeSure, Tropics se ha asociado con la compañía de açaí Sambazon, se presentó en la feria de arte Felix y el Hangar Barker del aeropuerto de Santa Mónica, y mantuvo conversaciones públicas con la propietaria de restaurantes Alice Waters y el fallecido crítico gastronómico de The Times Jonathan Gold, acerca de la desigualdad alimenticia.
El departamento de diseño y comercialización de Total Luxury Spa.
Ellos diseñan sus propias tablas de skate y camisetas, con el nombre de su empresa escrito en una fuente que semeja frutas, dibujado a mano por el cofundador de Tropics, Preston Summers. En el futuro esperan abrir una tienda de jugos en Jefferson y están en conversaciones para llevar un mercado de agricultores al vecindario para fin de año.
DeSure también crea estrategias para abordar la gentrificación, la desigualdad económica y la ansiedad ante las noticias. Quizá una camiseta podría cambiar algo de eso. El poder de la ropa siempre ha sido la comunidad, pero, hasta la fecha, ninguna marca de prendas cotidianas empoderó a su barrio de manera tan directa. “Es nuestra forma de crear más equilibrio y equidad”, comenta DeSure. Es suficiente que las camisetas de Spa se vean bien y sean usadas por los creadores de estilo, pero “nuestro enfoque hace que las personas se involucren con problemas más grandes, esos que todos leemos a diario en el periódico. Cuanto más grande podamos hacer ese impulso, más efecto tendrá”.
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