OPINIÓN: Preparándonos para la muerte en la era del coronavirus

Trágicamente los latinos y las personas de color mueren a un índice desproporcionadamente elevado por el coronavirus, en comparación con otros estadounidenses.

Salir simplemente de nuestra casa para ir por los frijoles o las tortillas, nos pone en mayor riesgo de enfermarnos, de terminar en el hospital, y posiblemente morir de esta horrible enfermedad.

Esta pandemia hace que sea urgente platicar con nuestros seres queridos, sobre lo que deseamos en caso de morir por coronavirus o de otra enfermedad. ¿Queremos medidas para sostener la vida, dependiendo de nuestra condición? ¿Quién nos representará en caso de no poder hablar por nosotros mismos?

Si la mayoría de nosotros nos hacemos cargo de nuestros últimos deseos de cuidados de salud, no le dejaremos estas desgarradoras decisiones de vida o de muerte, a nuestra familia o a los médicos, quienes pueden no saber lo que realmente deseamos.

El Día nacional de decisiones de cuidados de salud, es el 16 de abril, y es el momento perfecto para que nuestra gente tenga estas pláticas de sobremesa, acerca de nuestros deseos de cuidados de fin de vida.

Hace casi seis años, me sumé a Compassion & Choices, la organización sin fines de lucro de defensa para cuidados de salud de fin de vida, para abogar por la gama completa de opciones de cuidados de salud de fin de vida. Como buen latino, se que las conversaciones de este tipo, son un tema que no nos gusta abordar. Por desgracia, nuestra comunidad cuenta con las tasas más altas de enfermedades potencialmente mortales, como la diabetes.

Desafortunadamente, los latinos somos los que menos llenamos las formas de directivas anticipadas, o que platicamos con nuestras familias, si deseamos o no, recibir intervenciones médicas que prolonguen la vida.

Los latinos también somos menos propensos que los anglosajones, a utilizar las instalaciones que ofrecen cuidados de fin de vida, conocidos en Estados Unidos como hospicios. Sin embargo, la evidencia muestra que los latinos somos quienes más necesitamos dichos cuidados, según el American Hospice Association.

No obstante, esas disparidades que afectan a los latinos son algo que podemos controlar, al tener estas pláticas de antemano con nuestros médicos y seres queridos, sobre si deseamos mantenernos vivos con tratamientos agresivos en caso de que llegáramos a enfermar, a tal punto de no poder hablar por nosotros mismos.

Compassion & Choices tiene recursos bilingües en línea, incluyendo un Juego de herramientas y guía de planificación avanzada en español e inglés.

Esta simple herramienta le ayudará a platicar con su familia, amigos y proveedores de cuidados de salud, sobre sus deseos personales. Esta sección le ayudará a crear una directiva anticipada, un documento que explica en forma clara, sobre sus deseos de cuidados de fin de vida, para que sus seres queridos no tengan que adivinar lo que usted quiere, cuando usted ya no pueda tomar decisiones por sí mismo.

Crear una directiva anticipada, es algo que toda persona debe preparar. Puede ser un gran alivio para su familia.

Y literalmente, no existe mejor momento para hacerlo.

Esta es mi filosofía: Esta es mi vida, y yo decido qué deseo hacer con ella. Uno de los asuntos más importantes en la vida, es la muerte.

Si bien la mayoría de nosotros sobreviviremos esta pandemia, también mucha de nuestra gente morirá. Nadie sabe cuándo terminará esta pandemia. Aprovechemos estos momentos de aislamiento en casa, para poner un plan en marcha. Únase a mí para nombrar un apoderado médico, que lleve a cabo nuestros deseos de fin de vida.

Estas medidas tan críticas y difíciles, muestran amor y compasión para nuestros seres queridos, algo que todos necesitamos durante estos terribles momentos de incertidumbre.

* Mauricio Ochmann es actor en Hollywood y vive en Los Ángeles.